Domingo divertido

El fin de semana no ha sido reseñable, pero esta tarde de domingo sí, lo hemos pasado como enanos. Pablo nos ha invitado a probar uno de los karts que se ha comprado para montar su negocio, unos juguetes impresionantes la verdad. Después de juntarnos nos hemos ido a su nave del polígono de Argales, y hemos disfrutado como niños pequeños. Yo al principio me he arrimado al cuadriciclo con un poco de aprensión, aunque de pequeño monté varias veces en los karts de un circuito de Alicante ya no me acordaba de cómo se conducían, sabiendo que en cuanto les pones la zapatilla en el pedal salen disparados y que había poco espacio en la nave además de varias furgonetas y un camión, temía el guantazo contra la pared o pasar por debajo de una de las furgonetas.
Pero al final todo ha ido como la seda incluso cuando ya tenía cogida la medida del aparato me atreví con unos trompos. El que sí que ha tenido un poco más de reparo ha sido Diego, que al cambiar de marcha provocaba unos ruidos como de violinista nobel y Pablo chillaba eso de ¡Pero qué me estás haciendo!, a lo que Diego contestaba con su cara más inocente y diciendo -Pero si yo no hago nada. Aunque al final ha dado sus vueltas de rigor sin mayor problema.
Esperemos que tardes como esta se repitan y que Pablo tenga éxito en su nuevo negocio de venta de Karts.